Esta receta es la ganadora de la categoría semiprofesional del II Concurso Intergeneracional de la Cocina Sostenible y del aprovechamiento La Cocina de los Nietos, presentada por Diego Salamero Peralta, Georgina Rodríguez Jiménez y Nerea Fortuño Donaire, del IES Mar de Aragón. Para su preparación se han utilizado hortalizas ecológicas del proveedor del IES Mar de Aragón, Javier Mañez, hortelano ecológico ubicado en Caspe (Aragón), y además el ternasco cuenta con la certificación IGP Ternasco de Aragón y el aceite de oliva virgen extra con la DO Bajo Aragón. Esta receta es una buena oportunidad para descubrir a los productores ecológicos de tu zona.
El principal objetivo de esta receta es aprender a aprovechar los restos de la carne que nos pueden haber quedado de otras preparaciones como pueden ser caldos o guisos. Pollo, cerdo, ternera… todos nos pueden valer para realizar esta receta.
Recuerda que a la hora de adquirir carne es importante fijarse en su origen. La ganadería extensiva aporta beneficios ecosistémicos a muchos espacios de nuestro alrededor y su impacto es menor que otros tipos de ganadería como la industrial.
Cortar la cebolla en daditos y sofreír.
Cuando esté transparente, añadir el cordero asado troceado, rehogar y seguidamente echar la leche y la harina. Sazonar y terminar de asar en el horno a 170 grados durante 15 m. Transcurrido ese tiempo dejar enfriar un poco, triturar y meter en una manga, dejar reposar.
Por otro lado, cortar en láminas el calabacín, superponiendo unas con otras y cortar en rectángulos de 10x8 cm. Las sobras de los recortes de calabacín se pueden reutilizar para una crema.
Rellenar con la masa de carne, enrollar y asar al horno durante 5 minutos.
Una vez asado y colocado en el plato, salsear con la salsa de cordero reducida y montada con mantequilla.
Cortar la cebolla en daditos y sofreír.
Cuando esté transparente, añadir el cordero asado troceado, rehogar y seguidamente echar la leche y la harina. Sazonar y terminar de asar en el horno a 170 grados durante 15 m. Transcurrido ese tiempo dejar enfriar un poco, triturar y meter en una manga, dejar reposar.
Por otro lado, cortar en láminas el calabacín, superponiendo unas con otras y cortar en rectángulos de 10x8 cm. Las sobras de los recortes de calabacín se pueden reutilizar para una crema.
Rellenar con la masa de carne, enrollar y asar al horno durante 5 minutos.
Una vez asado y colocado en el plato, salsear con la salsa de cordero reducida y montada con mantequilla.
El principal objetivo de esta receta es aprender a aprovechar los restos de la carne que nos pueden haber quedado de otras preparaciones como pueden ser caldos o guisos. Pollo, cerdo, ternera… todos nos pueden valer para realizar esta receta.
Recuerda que a la hora de adquirir carne es importante fijarse en su origen. La ganadería extensiva aporta beneficios ecosistémicos a muchos espacios de nuestro alrededor y su impacto es menor que otros tipos de ganadería como la industrial.